Hoy es un día negro para el mundo entero.
Salvo para un "lobo feroz, su entorno y algunos secuaces" que expande su absolutismo despótico.
El mundo está triste.
Como si el cielo lo presagiara.
Hoy el negro cubre el cielo de Ucrania. No son nubes de lluvia; son nubes de humo de muerte y sangre.
Pero hoy no puedo dejar de expresarme con "las venas periodísticas" intactas que llevo.
Los datos, las cifras, las acciones, las medidas, todo eso ustedes lo saben, Estarán informándose.
No he hecho otra cosa que estar atenta a todos los Medios a mi alcance para estar actualizada con la situación que explotó en la madrugada nuestra.
Las consecuencias y los hechos que aún pueden ocurrir son imprevisibles.
El pueblo de Ucrania sufre, tiene miedo; se cobija como puede, despavorido se aglomera, improvisando salvoconductos, en las estaciones de metro. Es como estar en el Siglo XX; cuando los nazis arrasaban Europa.
He estado pensando; (tal vez equivocada) que, el mundo Occidental no ha comprendido la mente de Vladimir Putin. Le ha costado entender que su codicia y obsesión de poder lo dispone al máximo límite sin importarle absolutamente nada. Juega en el tablero de "todo o nada". Siento humildemente que el Mundo Occidental ha sido muy ingenuo.
(Spot difundido en redes sociales)
¿Serán suficientes las restricciones económicas y diplomáticas para detener a "un lobo feroz".? Su argumento es exactamente opuesto a la realidad. "Defenderse de Ucrania"; cuando a Ucrania le deben suministrar armamentos para defenderse.
Difíciles decisiones enfrenta hoy el mundo político. Ni la guerra ni la violencia es la salida. La inteligencia humana tendrá que iluminarse.
Mientras los misiles caigan sobre la población civil de Ucrania; el negocio es "redondo" para la fábricas armamentistas.
Uy, qué mundo!
La historia sigue replicándose.
¿Recuerdan cuando, en nombre de la propagación de la cultura, Alejandro Magno conquistaba Europa?: o cuando el Imperio Romano lo hacía también?
¿No le habrán otorgado a Putin, demasiado tiempo para mover sus piezas, mientras la guerra sobre Ucrania era "una guerra anunciada" (parafraseando a Gabriel García Márquez)?
No es la única.
El hambre en diversas regiones del mundo, la Pandemia que aún con densidad elevada continúa castigando al mundo, más a países como México, Brasil, India; además de los ya existentes conflictos armados en varios territorios del planeta; nos pronostica un 2022 para nada esperanzador.
Quién hoy mire para otro lado, como si no le influyera en su vida; no está entendiendo nada.
Duele.
Duelen los más de 130 muertos ya.
Los más de 100 mil desplazados.
Y las decenas de heridos.
Se sigue sumando a lo que ya duele desde hace décadas.
Y a pesar de las estrategias emergidas en Occidente; parecería que Ucrania está sola.
Se dijo que las medidas a aplicar contra el gobierno ruso "serán devastadoras".
¿Lo serán?; ¿Le importarán a Putin?
La codicia no sabe de límites ni raciocinio.
Son horas de despotismo; de violación de todos los derechos internacionales y fundamentalmente de la desvalorización de la vida humana.
Se dice: "Putin no ganará la guerra".
¿Lo veremos?
Estoy triste.
El mundo suma más guerra, en lugar de paz.
G.B
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DD.RR.
