AYER NIÑOS EN EL EXILIO; HOY ADULTOS HACIENDO MEMORIA.

"Guardo tantos recuerdos"! Es un suceso humano que trasciende en el tiempo. Una historia memorable, inolvidable.

26 de diciembre de 1983. Año del comienzo del proceso hacia el fin de la dictadura en Uruguay. 

Con la coordinación bajo estricta reserva de dirigentes políticos (proscriptos), dirigentes sindicales, personalidades de diferentes ámbitos nacionales e internacionales, se pudo concretar lo que parecía un sueño.

Víctor Vaillant. (Frente Amplio)

Silvia Ferreira (Partido Nacional)

Eduardo "Lalo" Fernández. (Partido Socialista)

154 niños, entre tres y 17 años, hijos de uruguayos exiliados en distintos países viajan al país el 26 de diciembre de 1983 a conocer sus familias. Un avión de Iberia los traslada desde Madrid al Aeropuerto Internacional de Carrasco.

Un río de gente se agolpó desde la terminal aérea y por toda la Rambla de Montevideo hasta la sede de AEBU (Ciudad Vieja) acompañando en caravana su recibimiento.

Este viaje es un hecho único en la historia y una manifestación de enorme solidaridad, para la que el regimen imperante no tuvo respuesta. Aunque suene muy increíble, si puso la condición de que las niñas no podían usar pollera cortas ni prendas de color rojo>.

Las cámaras de Canal 10 Saeta TV cubrieron este "fenómeno de masas, humano, social, político"para su Noticiero Central "Subrayado".

Allí estuve.

Fue la única vez que tuve que suspender por minutos la grabación junto al entrañable compañero camarógrafo Carlos Pombo. Estaba conmovida; sentir tanto la llegada al país de aquellos niños al país de sus padres, (al que el regimen no les permitía ingresar) como la partida de cientos de almas pequeñas y adolescentes a sus lugares de residencia; constituía una cobertura que superaba lo profesional.

Resgadador. Conmovedor.

Si para un adulto amante de la libertad y los derechos humanos es inconcebible la crueldad y la tiranía, menos lo puede ser para un niño.

"El exilio transita llevando sobre sus espaldas el peso de la lejanía y sentimientos contradictorios."

"A la experiencia individual traumática de la exclusión que significa el destierro, se agrega la elaboración de una estructura simbólica...de sospechas,...de culpas por - haberse ido -, - por haber sobrevivido -". En Uruguay se sobrevía como cada uno podía. (Cita: Libro "Los Niños del Reencuentro")

Psicólogos desempeñaron un rol fundamental para la contención de los niños y familiares. Se ajustaron a un Protocolo elaborado específico para el recibimiento y despedida.

https://youtu.be/8g2qrwk8lv0?si=S-an6J_5GmyPsKCU

He aquí uno de los tantos ejemplos de lo que no tiene que repetirse. 

NUNCA MÁS!

La memoria es el pilar de la historia y del porvenir.

Aquellos niños, hoy adultos forjan en nuestro Uruguay un futuro de tolerancia, respeto y gratitud.

No olvidar. No repetir la pérdida de derechos. No más dictaduras!

Cuidar, preservar lo más preciado de nuestro país: la Democracia.

Pero la de verdad!

LA MEMORIA se hace viva. 

"Cada niño era una familia luchando por volver"

Ese fenómeno cerebral y espiritual tan esencial a la hora de construir identidad se revive en diferentes circunstancias y congrega a todos ellos a rememorar "aquel mar humano"que los recibió. 

Y allí estuvimos.

Ellos no lo olvidan.

Este viernes 5 de julio del corriente nos reencontraremos.

Los abrazos serán con adultos. Aquellos niñitos que no podían comprender cabalmente la situación pero que su consanguinidad y amor a la familia les emocionaba hasta las lágrimas y algunos decían no querer salir del Uruguay; llevan en sus venas y corazón por siempre aquella travesía que movió el alma de todo un país y a quiénes quedaban en sus países de residencia (España, Suecia, Holanda, Dinamarca, Bélgica, Grecia, etc.).

Miles de Uruguayos recibieron a los niños que venían a conocer sus familiares. Les acompañaron en un verdadero río con el clamor "tus padres volverán".

"TUS PADRES VOLVERÁN"

https://youtu.be/jWehqJWbyXE?si=0y6lAhkBmta0_K-a

Cierro esta rememoración, la que mañana nos reencuentra con un completo informe realizado para Canal 10 por mi querida compañera MARÍA INÉS OBALDÍA (Periodista, hoy, Directora de Cultura de la Intendencia Municipal de Montevideo).

https://youtu.be/1hyQz0AWE18?si=sIUlv_c6uGahNiLM

Gracias María!

Gracias Ana Sosa Aldacor, María de los Ángles Fein, Isabel Collazo, Rossana Passeggi ("Los niños del reencuentro"; publicación del Museo de la Memoria con la investigación de las anteriores historiadoras, investigadores y profesionales mencionadas) y a cada uno de los "niños"por mantener imborrable ese hito en la historia de nuestro país.

La historia del REENCUENTRO, la fuerza del amor y la memoria.

Inolvidable.

>Fuente: Libro, "Los niños del reencuentro"

g.b

DD.RR

MONTEVIDEO, "AQUELLA TACITA DE PLATA "

 MONTEVIDEO, LA AÑORADA TACITA DE PLATA.

Fundada en 1723 por Bruno Mauricio de Zabala, Gobernador del Río de la Plata, fue la extensión de un sueño de Europa, como bien lo expresara uno de nuestros intelectuales ANGEL RAMA. El cometido de la fundación por parte de los españoles fue expulsar a los portugueses que habían edificado el Fuerte de Montevideo.

De aquellas murallas, apenas si queda un trozo en el denominado Casco Viejo o Ciudad Vieja..

El símbolo emblemático de nuestra historia fundacional se eleva hoy a través de la Puerta de la Ciudadela, ubicada frente a la principal Plaza donde se erige la escultura a nuestro Prócer de la Patria Jose Gervasio Artigas, dando acceso al Paseo Sarandí que va desde la Plaza hasta el Mercado del Puerto, lugar tradicional y con historia ineludible.

Puerta de la Ciudadela, (1782) Fotografía propia.

La presente entrega está inspirada y dedicada a mis amigos Bloggers.

Uruguay sigue siendo un país desconocido por millones en el mundo. Ser un Estado con una población comparable a una zona residencial de Sao Pablo (Brazil) lo hace pasar inadvertido globalmente.

No es un mero nacionalismo lo que me anima. Obviamente amo mi país y cada vez le encuentro más virtudes a pesar de la falencias y carencias.

Hoy les contaré sobre la Capital del Uruguay, Montevideo.

UBICADA sobre las márgenes del Río de la Plata y sobre la Bahía de Montevideo que mira hacia el Cerro con su nombre, la capital lucha entre la preservación de su Patrimonio y la "piqueta del progreso o modernidad.

Hoy lamentablemente a mis ojos se ve desmejorada, gris, deslucida. Resultado de la falta de sentido de pertenencia, de su extensión y dinamismo propia de la urbanización; ha ido perdiendo el encanto de "tacita de plata" o la adjetivación de "la Suiza de América".

El mayor pecado actual lo constituyen los grafitis locos, desmesurados, sin atisbos de arte. Ensucian paredes, monumentos, cualquier sitio donde se pueda dejar la marca de la desidia y la protesta es terreno fértil.

• Les hablaré de lo que todavía se rescata.

Montevideo tiene una arquitectura neoclásica y Art Decó extraordinaria: como así lo precia también la vecina ciudad de Buenos Aires (República Argentina).

La Rambla de Montevideo, con una extensión de algo más de 22 kilómetros es "el diamante"nuestro. Playas de arena blanca, aguas de río que a veces nos regala un verde espectacular, olas importantes por la influencia del Oceáno Atlántico y una urbanización al nivel del primer mundo.

Playa de los Ingleses, sobre Rambla de Montevideo.

Fotografía propia.

Al Rey de España Felipe III, le informan en 1607 que "se ha descubierto el paraje llamado Monte Vidio".  Tal el origen de la denominación de nuestra capital.

Nuestros primeros pobladores traídos desde el Viejo Continente fueron canarios (Islas Canarias). Llegaban con hambre y sus harapos, "con olor a hueso".

Después llegaron las invasiones inglesas en 1807.

La influencia inglesa perdura hasta nuestros días, sumándose a las corrientes de inmigrantes del resto de Europa, fundamentalmente italianos y esapañoles.

A pesar de nuestros años jóvenes, (Declaración de la Independencia en 1825), larga es la historia. De aquella plaza fuerte de un imperio decadente, luchas, guerras y conquistas; se levantó una Nación pujante de ideales e intelectuales, con una capital bien conocida como 'la tacita de plata' por su belleza y ubicación sobre el Estuario del Plata, correcta designación al Rio de la Plata.

Catedral de Montevideo, frente a la Plaza Matriz. Epicentro de la ciudad antigua.

Plaza Matriz en el corazón de la Ciudad Vieja en la actualidad. Fotografía propia.

Una de  las callecitas del Casco Histórico que da al río. Fotografia propia.

Uruguay tiene una población de algo más de tres millones de habitantes; un millón y medio reside en la capital. Abierto al mundo, con un desarrollo que nos equipara en muchos aspectos al primer mundo, somos según CEPAL, el país con mayor calidad de vida en América Latina y con la democracia mejor posicionada.

No me resulta fácil sintetizar una crónica sobre Montevideo.

Ahora que me detengo a escribir para ustedes, me doy cuenta la prolifera información que podría proporcionarles.

Desde la rica arquitectura a nuestro mundo académico, científico, intelectual, tecnológico, etc.

Museo Gurvich. Fotografia propia.

Artista visual uruguayo-lituano. Su actividad como pintor, ceramista y profesor de arte lo destaca como una de las figuras fundamentales del Taller Torres García y del arte del Uruguay.

1927-1974

Una de las Obras de Gurviche que se pueden observar en el Museo ubicado en Paseo Sarandí en Montevideo.

Fotografia propia.

Un español dijo en 1995 (Según la Historiadora Dra. Ana Ribeiro) "Quién ha estado en esta ciudad, quien la recuerda, quien ha establecido con ella un vínculo de añoranza y afecto, reconoce en un segundo  las cosas que más le gustan de ella, y siente un deseo perentorio de volver enseguida, de pasear otra vez por la Av. 18 de Julio, de bajar hacia el Puerto viejo o alejarse por las calles y casas…"

Av. 18 de Julio, fotografia propia.

Desde el Obelisco de Montevideo a Plaza Independencia.

Obelisco a Los Constituyentes.

Plaza Independencia; escultura a José Artigas, fotografia propia.

Obra de Ángel Zanelli, italiano (1879-1942)

Se aprecia el Edifico del Palacio Salvo.

Icono de la ciudad, inaugurado en 1928, fue edificado por iniciativa de los hermanos empresarios Ángel, José y Lorenzo Salvo y diseñado por el arquitecto italiano Mario Palanti.

No cerraré esta entrada sin hacer mención a dos grandes de nuestra intelectualidad: Juan Zorrilla de San Martín y Juan Manuel Blanes.

Tabaré, del "Poeta de la Patria" , (1855 - 1931)

Fotografía via internet.

Juan Zorrila de San Martín.

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Juan Manuel Blanes reconocido Pintor uruguayo quien se destacó por su obras con temas históricos nacionales. Fotografia via Internet.

1830-1901. Por el aporte de sus pinturas a la identidad del país, es considerado el "pintor de la Patria"

Obras sobre los LIbertadores "Los 33 Orientales".

Fotografia via internet.

ACTUALIDAD

"La Piedad"

Esculturas de Pablo Atchugarry

Y para finalizar, sonidos nuestros: "Adagio en mi país" <<

https://youtu.be/LYifzzIRSXg?si=wMunCZfFh0fsJcR5

Alfredo Zitarrosa (Montevideo, 10 de marzo de 1936-Montevideo, 17 de enero de 1989) cantautor, poeta, escritor, locutor y periodista uruguayo.

Tuve la fortuna de coincidir con Zitarrosa en los micrófonos de CX 14 El Espectador en los años 70, previos a la Dictadura (1973-1985)

<<Los lectores no hispanos, podrán disfrutar el sonido de las guitarras. Tan nuestras como los ríos, el mar y nuestro cielo celeste.

<<Non-Hispanic readers will be able to enjoy the sound of the guitars. As ours as the rivers, the sea and our blue sky.

Centro de Montevideo 

G.B

DD.RR

Domingo 30 de junio 2024

"CAMBRITA!

  El campo se extiende como pradera. Lo dibujan alambrados, sombras de álamos, eucaliptos, arroyos, caminitos y serranías.

La choza de cueros y matorrales se levanta en un pequeño espacio de campo cedido generosamente. La habita un encorvado, taciturno y longevo hombre entre la penuria y la pobreza.

La niña que concurre a caballo a la escuela rural más próxima lo mira con curiosidad cada vez que transita el lugar.

No se guarda la incógnita. Las preguntas forman parte de sí misma. Sin temor, decididamente cruza el alambrado. Se presenta a "Cambrita" en busca de conversación. Le entrega un pote de comida que resguarda de su almuerzo. 

Son tiempos de farol a queroseno, molinos de viento, agua de cachimba,  caballos como medio de transporte, y en todo caso muy  privilegiadamente un sulqui; monturas con adornos de oro y plata (herencias afortunadas mediante), y “espantapájaros”, en una suerte de títeres entre girasoles y maizales para conservar la cosecha.

 Cambrita sabe que durante el día lo abriga el sol y en la noche lo visten las estrellas. Un huidizo mortal que sabe muy bien que el alambrado pone límites.

Habla lo mínimo necesario. Su cuerpo delgado, arrugado, de baja estatura resalta sus penurias. En sus ojos se lee un dejo de desconfianza mezclado con ternura.

Las charlas se suceden. Una y otra vez.

El fin de su tiempo terrenal está presente en cada conversación; aunque sea indescifrable su edad.

Habla poco, muy poco. Su cuerpo delgado, arrugado y de baja estatura resalta sus penas acumuladas que encorvan su espalda. Tampoco lo ayuda su único asiento; un esqueleto de cabeza de novillo. 

La mirada, a pesar de sus ojos enterrados en su cara curtida por el sol, transmuta el sacrificio y soledad.

Para el resto de quiénes le ven, es “el viejo loco”, “el cuco”.

De aquél “viejo de la bolsa”, como así también se le denomina, la pequeña descubre un “manual de signos”.

Cambrita es un estepario entre pastos, ramas, pelegos, mate, una pava, una olla de hierro que no oculta sus años, brasas, cielo abierto y un despojo desde sus entrañas.

Con ojos fijos azabaches, vigila su nido. Colabora con alguna tarea de campo y pasa sus días en su choza de cuero, estacas, ramas, una yegua pastando a su lado, y su fuego a la luz de la intemperie. Un cuero de oveja es todo su lecho para dormir, facón incluido por detrás de su cintura. Facón que no supo nunca de heridas de muerte; utensilio con el que desmenuza la carne asada contra el hueso. Su comida apetecible y excluyente.

No conoce el hambre. El campo está a su disposición otorgándole sus requerimientos alimenticios. También el aire puro, agua fresca y límpida de arroyos o cachimbas. Hombre de “tierra adentro”. 

Su franqueza lo muestra cristalino, sus rasgos y adustos gestos invalidan su dulzura; pero en él existe. La prepotencia ajena lo endurece y convierte su desconfianza en el otro, una constante de su diario vivir. Un ermitaño típico.

Cambrita camina todo el tiempo con agigantados pasos, acentuados por sus largos tamangos a los que sabe dónde ajustar mejor; sobre todo, dónde pisan mejor, sin lastimar sus cansados y viejos pies.

Él es y no es como uno. Quiere vivir curtido por el sol o sorteando la escarcha. Sin normas. Sin apego más que al de su yegua de pelaje negro y cola del mismo color con una mitad blanca (de ahí, su nombre).

En el despojo, su paz aferrada está.

No siento temor de cruzar el cerco de alambrado. El deseo de conocer esa vida me resulta, a pesar de mis cinco años, muy fuerte. “Paaaseee mijita… paaaaseee; no tenga mieee  doooo”.

No tengo miedo; sí, muchas dudas.

Superadas, siento que estoy frente a un ser de corazón grande. Me invita a su único asiento.

Él respira profundamente, mientras acomoda su facón, que por su tamaño toca el suelo. Ni eso me provoca temor.

La pregunta no podría ser otra: ¿Por qué vives aquí? Tampoco resulta otra la respuesta: -“Porque aquí estoy bien".

Emocionada y perpleja  comienzo a tener conciencia de mi expectación.

Lo escucho confesarme: "Yo hablo con las estrellas”-

A cambio de muchas palabras, gesticula sus manos grandes, gruesas, duras, luciendo sus uñas largas que hacen de peine entre su blanca cabellera.

Pienso, lo imagino sumergiéndose en arroyos o lagunas cercanas como fuentes de higiene.

Su vocación es la libertad. Entre sus harapos y miseria lo que menos conoce Cambrita es la mezquindad.

Ese viejito osco ha comprendido perfectamente que el mundo que le rodea con metas, aspiraciones, límites, no le pertenece.

"De aquel viejito vagabundo y abandónico” ahora es para mí un ser de carne y hueso con vida propia. Se gana mi corazón.

Y yo el de él. 

Provoco asombro en mi familia.

Pero  la demostración no se hace esperar.

Cambrita me entrega de obsequio su yegua; su única compañía viviente. Mansa como ninguna.

Cambrita supo que su misión estaba cumplida.

La “Cola Blanca" se deja ensillar y montar con noble tranquilidad; jugueteando con el hocico, buscando caricias, mirando fijo, como acostumbraba su viejo antecesor.

“La Cola Blanca” envejeció.

La siento tan  mía que la hago eterna.

…………………………………..

Entre el ir y venir por los campos mirando las sierras; había llegado la hora final.

"Cola Blanca" se acerca a la casa. Se anuncia; relincha.

Sin más preguntas, entiendo que algo quiere decirme.

Papá, horas más tarde, me lo confirma.

 Cambrita se había sumado a las estrellas.

Los paseos en la libertad del aire puro, charcos y cañadas; piedras, malezas, flores silvestres y suspiros de bienestar, son mi deleite y mayor felicidad. No hay juego de infancia que supere el bienestar y gozo como el que me provoca cabalgar en mi "Cola Blanca".

Nada es para siempre.

"Cola Blanca" tendida en el pasto posicionando su cabeza con dirección a lo de Cambrita, da su último suspiro. Mis lágrimas le dan el adiós y el consuelo de mis padres me cobija.

Los equinos son animales fieles y grandes compañeros. Con ellos he aprendido el sentido de la libertad.

Con Cambrita entendí que no hay estereotipos. 

Prejuzgar es uno de los peores y comunes defectos humanos. 

La nobleza trasciende.

La memoria hace vivos a aquellos seres que nos hablan de amor y libertad.

g.b

DD.RR