Viajaste
casi a la perpetuidad.
Eres ese árbol
con frutos esparcidos,
de no,
no sé,
tal vez,
quizás,
no puedo.
Fuiste y eres un no.
Al no, lo venció la luz.
El mayor alumbramiento.
La mayor dimensión del ser.
Nació lo sublime.
Aún sin los no…
aún sin los nunca,
a los no puedo.
La vida venció.
Hasta tu nada!
G.B
DD.RR
La vida convertida en árbol que florece, da frutos y vuelta a empezar.
ResponderEliminarUn abrazo.
Noelia; perfecto!
EliminarEs el nacer, renacer, y la apuesta a la vida.
Gracias!
Otro abrazo para ti.
Siempre gracias!
That's so beautifully written. Thanks for sharing, Grace.
ResponderEliminarANGIE; Thank you for your loving concept.
ResponderEliminarI appreciate it from the bottom of my heart!
A hug!
La fuerza de la vida o … el instinto de supervivencia.
ResponderEliminarCreo...Al menos eso me parece tu texto en esta ocasión.
Bellas ambas fotos, acompañan genial "ese renacer"
Beso ¡buen atardecer de miércoles! (Muy frío por acá, no "afloja")
Gracias Lu querida!
EliminarLa fuerza, la apuesta por la vida y la determinación.
Este texto viene del archivo. De tantos sentimientos y experiencias que escribe la historia de nuestra vida.
Llueve aquí también; ya les contaré...
Abrazo.
Como nos gusta ver estas transformaciones amiga. Dan mucha alegría y ese verde esperanza de vida.
ResponderEliminarAbrazos 🤗 🤗 〰💕