Ya casi como que nos deslizamos hacia un final incierto. Un año que no resiste adjetivos. Habrá uno para cada persona; para cada situación. Dependerá de la resistencia y conformación psicosocial de cada uno. Lo que deba ser generalizado tal vez sea la incertidumbre. Esa a la que el ser humano le tiene desconfianza y poca empatía. Es legítimo. Si hay algo que nos identifica a los animales racionales es la proyección con objetivos concretos. Digo esto y los niños me vienen a la mente, como los más complicados junto con los adultos mayores. Las personas jóvenes siempre se caracterizaron por el desafío a los tiempos y tempestades. Insertos en un mundo de paradojas y miles de preguntas, hoy deslizo libremente el pensamiento porque la necesidad de comunicación se hace imprescindible al tiempo que la mente y los hábitos comienzan a acostumbrarse a la nueva realidad.
La presencia física la hemos sustituído por la vida online; a los seres queridos les recordamos con la compresión de no verles. Los encuentros se han cancelado. La vida del ser humano está ingresando a un terreno tan complejo que ya diferentes disciplinas como la Neuropsicología estudia sus efectos. Ignoro si las personas son conscientes de los cambios a los que estamos inmersos. Todo es tan rápido.
Los pensamientos corren. Mientras me voy acostumbrando a una nueva vida que no se como continúa...
A veces pienso que aquellos pensamientos, conceptos que concebíamos como válidos, hoy también se van modificando ante la imperiosa necesidad de sobrevivencia.
Escribir también se ha convertido en un ejercicio complejo. La avalancha de pensamientos llevan a una vida de lecturas internalizadas que hoy se hacen vigentes. Tanto para decir y poco para comprender.
Hasta el "próximo divague"
Graciela.
26 de octubre 2020
Querida Graciela: Me encanta lo que nos compartes porque es una reflexión de todo lo que estamos viviendo y algo lo cual nos ha cambiado la vida por completo. Gracias por compartir una maravillosa reflexión y deseo al igual que tú y muchos otros más que está situación cambie y podamos volver ha darnos abrazos sin precauciones y saludar sin usar zoom y hacer todo lo bonito que solíamos hacer como salir y caminar sin temor a contagiarnos y que los contagios se vuelvan alegrías.
ResponderEliminarMuchos cariños desde Nueva York 🍁🍂🧡🍁🍂🙅
Gracias a ti Marina por recibir mis palabras que nacen del sentir de estos nuevos tiempos que no sabemos muy bien hacia donde vamos. No es un "Pulitzer"; jaja...pero es otra manera de comunicarnos y no quedarnos en la liviandad o superficie. Al menos lo intento.
EliminarGracias, porque esto es la comunicación. Mis cariños para ti tambien desde esta orilla en la que la primavera sigue con pinceladas de invierno.
Que cierto es lo que dices amiga. Pero te soy sincera, esta nueva realidad NO me gusta. Como se añora la que hemos perdido. No era un realidad de grandes cosas pero si más afectiva. No sentir la presencia de los tuyos, nos está convirtiendo en más solitarios, hasta cuando? Impredecible. Seguiremos comunicandonos con familia y amigos a través de pantallas que cada día nos resultan mas frías.
ResponderEliminarEspero que terminaras bien este día un poquino complicado.
Buena noche Graciela. Cuídate.
Un abrazo.
Así es amiga querida!! El abrazo, la cercanía, la mirada a los ojos, la sonrisa...todo ello es insustituible. Me temo que deberemos poner a prueba nuestro poder de adaptación que no es otra cosa que la mejor definición de la inteligencia humana. Hoy doy gracias por haber comprendido hace tiempo la imprescindible necesidad de fortalecer nuestra entereza y espiritualidad.
EliminarGracias por estar siempre. Cada día tu presente es una luz que alegra el día! Abrazo.
Aprender de esta realidad, será lo positivo, creo yo. Las cosas, ni malas ni buenas, vuelven de igual manera. Y como dice una canción: "Nunca el tiempo es perdido".
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu reflexión la cual comparto.
Saludos.
Muy gentil y generoso de vuestra parte sumar al pensamiento con tu reflexión. Vaya si estaremos aprendiendo nuevas cosas!. Finalmente, seres, hijos de las circunstancias, parafraseando a Ortega y Gasset. Aunque no sea idéntico para todos. No hay absolutos. Coincidimos: "Nunca el tiempo es perdido". Bueno, malo, más o menos, de todo se aprende. Aprecio vuestras palabras. Muchas gracias por llegar hasta aquí. Cordial saludo.
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